El huevo de la serpiente
El film está ambientado en Berlín en el período de entreguerras y presenta, junto a la miseria económica, el germen de la investigación médica nazi. Bergman ficciona allí una serie de experimentos que incluyen la resistencia psicológica al sufrimiento, el aislamiento sensorial, las reacciones a las drogas (Thanatoxina) y las pruebas con el gas Kapta Blue. Estas experiencias, realizadas todavía de manera semi clandestina, serán la antesala (el “huevo de la serpiente”) de la política biomédica del III Reich. Así lo anuncia el médico experimentador, anticipando lo que una década más tarde serían los programas de esterilización y “eutanasia”, y poco después los experimentos y “tratamientos especiales” en los campos de concentración.
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